Con los autos que se manejan solos, ¿Los accidentes automovilísticos serán cosa del pasado?

La mayoría de nosotros hemos visto esos anuncios de coches donde el coche que se anuncia tiene la capacidad para estacionarse a sí mismo y  predecir un accidente mucho antes de lo que podría un conductor humano. Con la noticias recientes de que la tecnología de los vehículos autónomos (o los coches de auto-conducción) está avanzando rápidamente, varios clientes  me han preguntado si creo que los accidentes automovilísticos serán pronto una cosa del pasado. La respuesta corta es: no es probable.

Empresas como Google y Tesla actualmente están gastando grandes sumas de dinero en el desarrollo y pruebas de nuevas tecnologías que harán que la producción en masa de los coches de auto conducción sea una cosa que podamos ver en el futuro. Florida es actualmente uno de los cuatro estados que han legalizado las pruebas de los vehículos de auto-conducción por la vía pública.

Se estima que el 40% de los accidentes automovilísticos se producen debido a  fallos del conductor, ya sea por drogas, alcohol, somnolencia, tecnología, o distracción general. El argumento es que un coche de auto-conducción no estará sujeto a ninguna de esas fallas, y su tiempo de respuesta a los riesgos potenciales será mucho más rápido que incluso el del piloto más alerta. Así que, ¿cuál parece ser el problema?

En mi opinión, hay por lo menos dos obstáculos principales que se interponen en el camino de este futuro utópico, y van a mano. El primero es el costo. Siendo realistas, no todo el mundo va a querer o va a ser capaz de permitirse un coche de auto-conducción. ¿Cuánto le va a costar al fabricante para que sigan siendo rentables? Esa respuesta no depende únicamente del costo de la tecnología, las piezas, mano de obra, y las ventas; la mayor incógnita de esta ecuación es la responsabilidad.

Un gran número de accidentes hoy en día suceden a causa del exceso de velocidad. La gente siempre tiene prisa, y no es raro que a alguien se le haga tarde para llegar al trabajo o a una reunión. Preveo que el fabricante de un vehículo de auto-conducción no va a exponerse a una mayor responsabilidad al permitir que los vehículos rompan los límites velocidad a petición del propietario. El escenario más probable es que los coches de auto-conducción del futuro tengan dos opciones: el modo de piloto automático y modo controlado por el usuario.

Suponiendo que es cierto, si un futuro cliente viene a mí y me dice que un coche de auto-conducción golpeó su vehículo por detrás mientras estaba detenido en el tráfico, y como resultado hubo lesiones ¿A quién puedo demandar? Supongo que el fabricante va a culpar al usuario y viceversa. Sin la capacidad de descubrirlo antes de la demanda, no me quedaría otra opción más que demandar a los dos. Esperemos que durante las primeras etapas de litigio, se descubra quién o qué causó el accidente; mientras tanto, el conductor y el fabricante, ambos han sido demandados, y ambos han gastado dinero en abogados para defender el caso.

Si un fabricante va a ser demandado cada vez que se alegue que uno de sus coches de auto-conducción  ha causado un accidente, esto potencialmente podría causar la bancarrota de la compañía, o los obligan a cobrar bastante dinero por coche de auto-conducción para compensar la diferencia y aún así obtener una ganancia; esa razón por sí sola es por qué, a pesar de la tecnología de vehículos autónomos que existe hoy en día, su adaptación completa a nuestras carreteras (y por lo tanto una reducción significativa en accidentes automovilísticos) esta todavía a décadas de distancia.

Fotografía por Nancy Van House en Flickr